DEL MATRIMONIO....



Cásate con un arqueólogo. Cuanto más vieja te hagas, más encantadora te encontrará.
Lo más razonable que se ha dicho sobre el matrimonio y sobre el celibato es esto: hagas lo que hagas te arrepentirás.
El amor es un juego; el casamiento un negocio.
El matrimonio es una cadena tan pesada que para llevarla hace falta ser dos y, a menudo, tres.
El amor es física. El matrimonio, química.
En Oriente la mujer no suele ver al hombre antes de casarse. En Occidente, después.
Matrimonio: Estado o condición de una comunidad que se compone de un señor, una concubina y dos esclavos, todo en solo dos personas.
Un matrimonio feliz, es una larga conversación que siempre parece demasiado corta.
Cásate demasiado pronto y te arrepentirás demasiado tarde.
Todas las mujeres deberían casarse; los hombres, no.
Donde hay matrimonio sin amor, habrá amor sin matrimonio.
Ten tus ojos bien abiertos antes del matrimonio; y medio cerrados después de él.
El matrimonio es tratar de solucionar entre los dos problemas que nunca hubieran surgido al estar solo.
Patrimonio es un conjunto de bienes; matrimonio es un conjunto de males.
El matrimonio acaba muchas locuras cortas con una larga estupidez.
La edad de casarse llega mucho antes que la de quererse.
El amor es ciego, pero el matrimonio le restaura la vista.
El matrimonio, al contrario de la fiebre, comienza con calor y termina con frío.
Cuando dos personas están bajo la influencia de la más violenta, la más insana, la más ilusoria y la más fugaz de las pasiones, se les pide que juren que seguirán continuamente en esa condición excitada, anormal y agotadora hasta que la muerte los separe.
El matrimonio debe ser una relación ya de simpatía o ya de conquista.
Solamente el bígamo cree de verdad en el matrimonio.
Casi siempre que un matrimonio se lleva bien, es porque uno de los esposos manda y el otro obedece.
El matrimonio es la principal causa de divorcio.
El matrimonio es una gran institución. Por supuesto, si te gusta vivir en una institución.
Conozco a centenares de maridos que volverían felices al hogar si no hubiera una esposa que les esperara. Quiten a las esposas del matrimonio y no habrá ningún divorcio.
El matrimonio es una gran institución para quien admira las instituciones.
Todavía no se ha descubierto la brújula para navegar en la alta mar del matrimonio.
Cuando podía haber tomado esposa, no pude soportar a ninguna; y cuando pude soportar a alguna, ya no necesitaba a ninguna.
La felicidad en el matrimonio depende enteramente de la suerte.
El amor es a menudo fruto del matrimonio.
El matrimonio es una barca que lleva a dos personas por un mar tormentoso; si uno de los dos hace algún movimiento brusco, la barca se hunde.
El matrimonio es al amor lo que el vinagre al vino. El tiempo hace que pierda su primer sabor.
El mejor matrimonio sería aquel que reuniese a una mujer ciega con un marido sordo.
El matrimonio es como una jaula; uno ve a los pájaros desesperados por entrar, y a los que están dentro igualmente desesperados por salir.
Indudablemente la época más feliz del matrimonio es la luna de miel; lo malo es que para repetirla, han de suceder cosas muy desagradables.
Es curioso este juego del matrimonio. La mujer tiene siempre las mejores cartas y siempre pierde la partida.
La mejor base para un matrimonio feliz es la mutua incomprensión.
El encanto del matrimonio es que provoca el desencanto necesario por las dos partes.
Se llama matrimonio de conveniencia a un matrimonio de personas que no se convienen en absoluto.
Bigamia es tener una esposa de más. Monogamia es lo mismo.
Hay maridos tan injustos que exigen de sus mujeres una fidelidad que ellos mismos violan, se parecen a los generales que huyen cobardemente del enemigo, quienes sin embargo, quieren que sus soldados sostengan el puesto con valor.
Seguramente existen muchas razones para los divorcios, pero la principal es y será la boda.
Es cierto que no te quiero tanto como cuando éramos novios, pero es que a mi nunca me han gustado las mujeres casadas.
La mujer llora antes del matrimonio, el hombre después.
Casarás y amansarás.
El que se casa por todo pasa.
El melón y el casamiento han de ser acertamiento.
Casamiento y mortaja, del cielo baja.
Quién mal casa, tarde enviuda.
En todo matrimonio que ha durado más de una semana existen motivos para el divorcio. La clave consiste en encontrar siempre motivos para el matrimonio.
El matrimonio es como la vida real; un campo de batalla y no un lecho de rosas.
Casarse por segunda vez es el triunfo de la esperanza sobre la experiencia.
Mi consejo es que te cases: si encuentras una buena esposa serás feliz, si no, te harás filósofo.
Cásate; si por casualidad das con una buena mujer, serás feliz; si no, te volverás filósofo, lo que siempre es útil para un hombre.
Me preguntas si debes o no casarte; pues, de cualquier cosa que hagas te arrepentirás.
Si realmente el período de noviazgo es el más bello de todos, ¿por qué se casan los hombres?.
Si te casas lo lamentarás. Si no te casas, también lo lamentarás.
El amor abre el paréntesis, el matrimonio lo cierra.
El matrimonio, como los injertos, prende bien o prende mal.

Seguidores

PAGINAS AMIGAS

http://www.madamealbert.com.mx/woman-c2lh http://elespaciodemartha.blogspot.mx/ http://xochitlndc.blogspot.mx/ http://cronicadeunaamantedeloslibros.blogspot.mx/ http://creadasaimagendedios.blogspot.mx/