QUEMADA VIVA
Este libro cuenta la historia de Souad, una mujer cisjordana que sobrevivió a un crimen de honor (Jarimai al Sharaf).
Haber nacido mujer en un pueblo de Cisjordania, en un parte del mundo, en una sociedad del mundo, en donde la vida de una mujer puede ser peor que la de los animales. Hasta Souad misma recuerda una frase de su padre, en la que él valora más la vida de una oveja o de una vaca que la de una hija porque «Al menos ellas dan leche y lana».
Actualmente Souad se encuentra refugiada en Europa, adonde llegó gracias a la ayuda de una cooperante francesa que trabajaba con niños en Palestina e Israel porque si se descubriera que Souad sigue viva, su familia volvería a perder el honor. Eso significa que otra vez estaría condenada a muerte. Son pocas las mujeres que consiguen salvarse de un crimen de honor huyendo a otro país. Sin embargo, muchas de esas pocas mujeres mueren en el extranjero al ser descubiertas por alguien que las conocía.
Como se lee en la presentación, esta autobiografía narra la historia de una joven que se convierte en una charmuta (puta) al quedar embarazada sin estar casada. En su país, no en la cultura musulmana como erróneamente se cree, eso significaba entonces llevar la deshonra para toda la familia. Para todo el pueblo. Solo un crimen de honor podría devolver la dignidad a la familia, de lo contrario nadie querría relacionarse con ellos.
Como se lee en la presentación, esta autobiografía narra la historia de una joven que se convierte en una charmuta (puta) al quedar embarazada sin estar casada. En su país, no en la cultura musulmana como erróneamente se cree, eso significaba entonces llevar la deshonra para toda la familia. Para todo el pueblo. Solo un crimen de honor podría devolver la dignidad a la familia, de lo contrario nadie querría relacionarse con ellos.
“Quemada viva” también es una historia de milagro y de esperanza porque a pesar de tener quemada la piel en un 80 por ciento, Souad salvó su vida y la de su bebe aún no nacido.
Las mujeres de todos los lugares del mundo, de todos los colores y creencias deben tener el más elemental de los derechos: vivir, y vivir con esperanza, amar sin matrimonios arreglados y sin el sometimiento a la familia o a un determinado régimen social o cultural.
Vivir con derechos. Simplemente!
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