¿ME QUEDO O ME VOY?
"No hagas con el amor lo que un hace un niño con su globo, que al tenerlo lo ignora y al perderlo lo llora".
Pablo Neruda
Cuando una relación amorosa deja de aportar aquellos ingredientes fundamentales que la propiciaron (emoción, seguridad, tranquilidad, sexualidad y sobre todo amor) entonces es el momento de hacer una pausa.
Los invito a que de forma sincera y objetiva analicen lo siguiente.
Me quedo:
• Cuando los conflictos no deterioran mi autoestima ni mi integridad física.
• Cuando hay por lo menos dos prioridades que considero importantes satisfechas.
• Cuando no se ha perdido el intercambio afectivo.
• Cuando puedo ser yo mismo(a) aunque no me guste la realidad que observo.
• Cuando hay intercambio equitativo de obligaciones y derechos.
• Cuando me siento respetado y protegido por el otro en necesidades importantes para mí.
• Cuando seguimos buscando objetivos en común.
• Cuando la relación, promueve nuestro crecimiento mutuo.
• Cuando a pesar de las adversidades, tenemos la capacidad de perdonarnos (dejar ir el pasado) y retomar la relación con conciencia.
• Cuando la relación tiene momentos de dicha en compañía.
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